Recientemente diputados de ‘Unidos Podemos’ escenificaron la presentación de una propuesta en nombre del grupo parlamentario para derogar la Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local, también conocida como Ley Montoro. Sin entrar a valorar la oportunidad de la iniciativa en un asunto ampliamente trabajado desde IU, lo que queremos destacar son las formas empleadas por nuestra organización, o mejor dicho, la ausencia de formas en una materia donde la información a los grupos municipales y demás ámbitos afectados es esencial.
Es preciso recordar que una fuerza política eminentemente municipalista como es Izquierda Unida, participó activamente en la presentación -ya hace dos años- ante el Tribunal Constitucional de un recurso contra la Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local –más conocida como Ley de Reforma Local- impuesta por el Gobierno del PP. Cerca de 3.000 ayuntamientos de todo el Estado, en representación de alrededor de 17 millones de ciudadanos a través de distintas fuerzas políticas y con una amplia presencia de IU en ellos, firmaron aquel recurso en “defensa de la autonomía local” y contra “el mayor ataque cometido en democracia contra el municipalismo”.
Entre los dirigentes y cargos locales de IU presentes en la entrega de la amplísima documentación del recurso embalada en cerca de 80 cajas se encontraban la secretaria ejecutiva federal de Política Institucional, Montserrat Muñoz; el responsable federal de Política Municipal, Manuel Fuentes, y el alcalde de Rivas Vaciamadrid, Pedro del Cura, además de una amplia representación de ediles de la formación de todo el Estado.
La de entonces fue una acción ampliamente anunciada y respaldada por nuestro municipalismo y que contó, de hecho, con un enorme y activo apoyo de nuestros alcaldes y concejales. Nada de esto ha tenido lugar ahora, en la gestación y preparación de la iniciativa que se ha resumido en la pancarta cuyo lema era #CiudadesConDerechos. Convendría, pues, hacer una severa crítica por la insuficiente coordinación demostrada entre miembros de la Comisión Colegiala y, en concreto, entre la responsable de Municipal y los cargos públicos en los municipios.
Hay un gran malestar entre los compañeros y compañeras que se esfuerzan cada día en sus ayuntamientos y entre sus vecinos, pues la sensación que se ha transmitido es que alguien nos ha conducido hacia una pancarta y nos ha situado ante un manifiesto -Manifiesto de Oviedo-, para el que se nos pide apoyo sin que se nos informe o se dé a conocer dónde se ha aprobado esa propuesta. Ello ha motivado que muchos y muchas concejales, alcaldes y cargos públicos se hayan negado a firmar un documento que no ha surgido de la autonomía de IU, que no se ha elaborado en la Comisión Colegiala federal de IU y que no lleva nuestro logo…
No siendo un hecho previamente meditado y decidido ciertamente lo ha parecido, por lo que mucha gente dentro de IU piensa que la organización ha sido ninguneada y que ello habría sucedido, aparentemente, ante la indiferencia de nuestra dirección federal. ¿Cuál es la razón por la que no se ha dado la oportunidad de que naciera una propuesta en el ámbito de IU y que luego pudiera ser negociada o refundida? ¿Por qué se ha dado la espalda, no sólo al trabajo de tantas personas durante muchos años, sino a la visibilidad de IU? ¿Por qué se ha pasado por alto el necesario reforzamiento y fortalecimiento de IU de cara a las municipales de 2019?
Las formas son importantes, tanto más cuando de la inacción de unos emerge el protagonismo de otros, por lo que sería interesante conocer las razones de unos y los objetivos de los otros. Mientras tanto, lo que queda es el sentimiento de desilusión de muchos compañeros y compañeras ante la ocasión pérdida de mostrarnos una fuerza necesaria en el ámbito municipal, una fuerza prestigiada y con visibilidad propia, una fuerza capaz de tomar decisiones importantes de forma compartida y autónoma, como siempre hemos hecho.
